Hace relativamente poco, escribimos una nota sobre el hallazgo de una momia“meditando” después de 200 años, y todo parece indicar, que esto de encontrar momias ya le gustó a los científicos.
El día de hoy, se dio a conocer que el pasado diciembre se registró en los laboratorios del “Meander Medisch Centrum”, en Holanda, el descubrimiento de un extraño ente en el interior de una estatua de Buda que se exhibe en el Museo de Drenthe, cuando unos especialistas realizaban a esta figura una topografía computarizada.
Los restos encontrados, pertenecen supuestamente a un maestro budista que data de entre los siglos XI y XII, según los diversos estudios que fueron realizados para determinar su origen y antigüedad. Se pretende estudiar también las cavidades torácica y abdominal del cadáver, debido a que los órganos fueron sustituidos por papeles con inscripciones en chino clásico.
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