Hoy es el día de la Lengua Materna, y nosotros decidimos que es un día especial para conocer las lenguas maternas de otros ciudadanos mexicanos. Recordemos que en México no se habla solamente español, sino, orgullosamente, somos uno de los países con más diversidad de lenguas.
La cantidad de idiomas que se hablan en el país es impresionante, y es que en nuestro país no solamente se hablan los idiomas que se originaron en América, sino que también hay personas que hablan lenguas asiáticas, europeas y hasta africanas.
México es un país en el que hay una diversidad muy grande de gentes, desde inmigrantes chinos y coreanos, hasta ciudadanos cuyos ancestros han estado en estas tierras por miles de años. Todos contribuyen a la cultura de nuestro país y todos y cada uno de ellos son parte de nosotros.
Claro que todo lo estamos poniendo muy bonito aquí, todo el mundo sabe que en México hay mucha discriminación y la discriminación lingüística es un problema muy grande.
En el país no se reconoce una sola lengua oficial sino que, según la Ley General de Derechos Lingüísticos de los Pueblos Indígenas, todas y cada una de las lenguas que se hablan aquí son lenguas nacionales. Pero esto no se ve reflejado en los medios de comunicación, en las escuelas y en la traducción de las leyes a las lenguas de los pueblos originarios (por ejemplo).
No solamente hay una discriminación oficial, los mismos ciudadanos discriminan a aquellos que no hablan español y los obligan a no utilizar su lengua materna. Pero esto debe parar, todos nosotros debemos entender que las otras personas tienen derecho a hablar la lengua que sus padres les enseñaron y además, podríamos interesarnos más por ellas, aprender idiomas como el náhuatl, el maya, el rarámuri, zapoteco o el wixárika en alguna de sus variante ayudará a enriquecer nuestra manera de entender el mundo.
Esta niña nos enseña el orgullo que todos deberíamos tener de nuestros diversos orígenes en México
No olvidemos que también hay comunidades de origen no americano que también hablan sus propios idiomas, como Plautdietsch en los estados norteños, el idioma véneto en Puebla, el francés, el catalán, el vasco, el alemán, el ruso, el portugués, el inglés, el árabe, el coreano, el chino y hasta idiomas de comunidades indígenas de otros países como el kikapú, el pápago (de Estados Unidos) o el quechua (de Perú y Ecuador).
Otro tipo de idioma es la lengua de señas, recordemos que aprender esta lengua es una manera de comunicarnos con nuestros conciudadanos sordo-mudos. Se estima que los señantes de la lengua de señas mexicana podrían llegar a ser hasta 100 mil.
Por otro lado, muchísimos nombres de las localidades del país y palabras en el español mexicano tienen origen indígena, así que aprender esos idiomas nos ayudaría a entender mejor nuestra propia cultura (a mí me pasó cuando estudié náhuatl en la universidad, al igual que entendí más sobre el español cuando tomé un curso de latín).
Todos nuestros ciudadanos que hablan una lengua diferente son increíbles porque son, por lo menos, bilingües, y hay casos interesantes como el de los indígenas que se van a Estados Unidos a trabajar y regresan también hablando inglés. Si ellos pueden hablar tantos idiomas ¿por qué no inclinarnos a tratar de entenderlos mejor?
También interesarnos por las comunidades de inmigrantes en México ayudaría a que ellos pudieran establecerse mejor en nuestro país. América es un continente de inmigrantes y en México han llegado personas de todo el mundo desde hace, por lo menos, medio milenio (nuestras expresiones culturales son una mescolanza de elementos de diversos pueblos de todo el mundo).
Así que ya saben, todos debemos hablar orgullosamente nuestra lengua materna, porque es importante para el país mantener su riqueza diversa, y debemos interesarnos en aprender las lenguas de los demás para entenderlos y ampliar nuestras maneras de ver y entender el mundo.
Sólo aprendiendo a ver cómo ven las cosas los demás que viven aquí, podríamos lograr hacer todos juntos un país mejor ¿o ustedes qué opinan?
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