Oh, esta es buena. Resulta que una chica en la bonita ciudad de Milton Keynes en Reino Unido no pudo con la emoción de ver la historia de 50 Sombras de Grey en la pantalla grande y… Bueno, aquí su trágica historia.
Nuestra amiga entró a una sala de cine para ver la película en cuestión y el desastre se hizo presente ya que había consumido alcohol de más. No se dio a conocer el nombre de la chica, así que le diremos Patrice.
Patrice se encontraba viendo la cinta en una sala llena de público, de pronto no pudo más y para el horror de todos los presentes, empezó a vomitar sin control por todos lados. Si creen que las cosas no podían empeorar, se equivocan.
Una vez en el piso, Patrice dejó de vomitar, pero perdió control de su cuerpo y todos los fluidos que podían salir de su cuerpo, empezaron a salir. Sí, por todos lados.
La sala se volvió una cámara de gases mortales, pero todos vivieron para contarla y qué bueno. ¿Les regresaron su dinero? Pues en eso están.
Vía Mirror
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