Razones por las que te puede ir bien aunque no vayas a la universidad

Está claro que contar con un título universitario es de lo más respetable, pero hay que tomar en cuenta que hay otras formas de construir una carrera y hacerte exitoso sin necesidad de uno.

La universidad no es para todos, y eso está bien. ¿Dudas si quieres seguir estudiando? ¡Lee esto!

- Puedes entrar en el mundo laboral a una temprana edad

Puedes adquirir muchísima experiencia desde joven. Hay muchos empleos que son más prácticos que teóricos en los que no necesitas ningún tipo de estudios para poder realizarlos, sino mucha práctica.

- ¿Tienes un hobby que se ha vuelto tu pasión?

Si ya acabaste la preparatoria, podrías dedicarte al cien a eso que siempre te ha apasionado:  bailar, cantar, tocar algún instrumento, actuar, cocinar, ¡algo con lo que no puedas vivir! Nada como hacer lo que te encanta y que te paguen por ello.

- Desarrollas tus habilidades 

Lo mejor de entrar en el mundo laboral a una temprana edad es que desarrollarás muchas habilidades. Según algunos estudios, los empleadores están más interesados en personas que tengan ética laboral, que puedan trabajar bajo presión y que tengan una actitud positiva, que en jóvenes con carreras, quienes tienen poca o nula tolerancia a la frustración. ¡Perfecto!

- Conocer tus opciones 

Hay muchísimas ocupaciones que no necesitan de estudios: agente de bienes raíces, tener tu propio negocio, cocinar (sí, hay chefs pero mucho es con la práctica), blogger (están muy de moda y hasta te puedes hacer muy famos@), escritor freelance, vendedora, etc. ¡Investiga y comienza a dedicarte al cien!

- ¡Tecnología!

¿Has escuchado sobre la “escuela de Google”? Puedes buscar lo que sea y encontrarás diez mil opciones y tutorial de cómo hacerlo. También hay muchísimos foros gratis para aprender a hacer cosas sin necesidad de ir a la universidad y comenzar a ganar dinero. ¡Podrías empezar tu propio negocio!

- Tendrás dinero 

Mientras tus amigos están en la universidad sufriendo por el poco dinero que reciben de sus padres, tú ya tendrás tu propio dinero. Además, no hay nada como el sentimiento de haberte ganado eso con tu propio esfuerzo.

Eso sí, no olvides ahorrar la mitad para poder invertirlo en un futuro.

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